Ir al contenido principal

EL DUELO

Como debían sacar mi estómago decidí hacerle el duelo. Me iba a comer lo que posiblemente nunca volvería hacerlo. Comprė unos chicharrones gigantes y fui a compartirlos con mi mamá.  Me convertí en una persona diferente, una que come mucho y repite. Hice una torta de chocolate que disfruté yo sola de cada bocado. En cuestión de ocho días había comido más de lo imaginado. Después sería flaca y hasta podría heredar ropa de mis hermanas delgadas. Pero llegó la desilusión. No sacaron mi estomago. Pude seguir comiendo normalmente y con buenos hábitos. El tratamiento alteró mi metabolismo. Ya no seria una mujer delgada, había llegado otro cambio a mi vida, era una mujer gorda. No quedaba más remedio. Aceptarlo y ser feliz.

Comentarios

Entradas populares de este blog

🤔

🗯

😃